Daniel Alvarado, afiliado del Movimiento Popular Neuquino opina desde las bases sobre la interna del partido que gobierna la provincia.
Las elecciones internas del Movimiento Popular Neuquino siguen siendo un elemento movilizador de la sociedad neuquina. La cantidad de votantes que hubo en la elección del 25N fueron una muestra más de su intensa vida puertas adentro.
Claro que ha cambiado el histórico partido Tiene intensidad por presencia en la vida de los Neuquinos. Nadie permanece indiferente cuando el Movimiento comienza su proceso de selección de candidatos.
Y las últimas elecciones fueron una muestra de cuanto ha cambiado el partido sin su guardia vieja, aquella que fue una formidable escuela de cuadros que veían al partido como una herramienta de transformación al servicio de la sociedad. La idea de desarrollo y bienestar era el motor del gobierno, la planificación un ejemplo que imitaban los jóvenes Estados de la Patagonia.
Y aquella calidad de cuadros, hoy es anhelada con nostalgia. Basta con realizar un breve comparativo entre lo que sucedió en la gran interna entre Pedro Salvatori y Jorge Sapag en 2006:
Diferencias: 17 puntos (2006 diferencia) – 23 puntos (2018 diferencia)
Votos en blanco 14% (2006) – Votos en blanco 6% (2018)
Electores: 98.900 – 32,42% del padrón habilitado (afiliados más independientes) 130.000 votantes, el 30,78% del padrón habilitado (afiliados más independientes) en 2018.
En 2006 La lista Azul se impuso en todos los municipios salvo Loncopué en categoría gobernador
Salvatori reconoció la derrota a las 21,05 hs y se comprometió a trabajar «todos juntos» para el triunfo del partido y pronosticó que Brillo sería “el futuro intendente de la capital”. Jorge Sapag respondió “Estamos obviamente abiertos a la unidad del partido, vamos a conversar con el sector de Salvatori, comienza la etapa de la unidad”.
Salvatori, lista blanca, en aquella elección de 2006 se impuso en 4 municipios: Chos Malal, Las Lajas, Cutral Có y Plaza Huincul para categoría intendentes, similar a la del 2018 en que la lista violeta ganó en 5 municipalidades.
Obviamente en aquellos años no existía la presencia dominante de Facebook e instagram que han transformado la realidad real en la realidad virtual donde importa más “los me gusta y los seguidores” virtuales que los ciudadanos de carne y hueso.
La construcción de trajes a medida, ese espejo que devuelve la imagen pretendida en las redes sociales no es la realidad real son el nuevo diario de Yrigoyen.
Figueroa, como lo hizo Salvatori en 2006, tiene la obligación de dar pasos hacia la unidad del MPN, deponer egos y actitudes megalómanas para asumir la responsabilidad de representar a miles de neuquinos que el domingo 25 plasmaron su voluntad en las urnas. Un poco de grandeza como en las viejas épocas, solo eso.